miércoles, 11 de enero de 2017

El río



Eran las 2 de la mañana y no lograba conciliar el sueño, me había tomado aquella fulana pastilla recomendada por el médico, ése que cuando murió mi esposa, me dijo sutilmente, que si no me la tomaba cada día iba a parar en loco, me encerrarían y me colocarían una camisa de fuerzas. ¿Por qué ese hombre me dijo eso?, ¿Es que acaso había dado indicios de locura en mi comportamiento, o quizás él creía que sin Josefa no lo podría lograr?.

Han pasado ya 5 años desde su muerte, desde ese día en que sencillamente decidió dejarme para ir al encuentro de nuestro hijo. Siempre he pensado que fue muy egoísta de su parte, irse sin avisarme, sin decirme si quiera que ya estaba cansada de mi compañía, y además irse y dejarme en esta casa enorme, donde cocinar se me hace perezoso y dormir completo no consigo ni una sola noche. Tampoco todo ha sido tan malo desde hace 5 años, por lo menos tengo mucho más espacio en la cama y ya no tengo que esperar que vea su novela para yo poner mi programa favorito.

Hoy, en el quinto aniversario de su partida, decidí finalmente salir de la casa, creo que ya es suficiente luto, creo que ya no hay más lágrimas por llorar, ya no hay más palabras en contra de Dios para que me explicase por qué decidió llevársela de mi lado, si es que ese dios de verdad existe. Pasaron 5 años y todo seguía intacto, ella no regresó, ni siquiera en las noches a espantarme, simplemente ya no está.

Salgo de casa con la firme convicción de unirme a su encuentro, preparo algo de comida ligera para el camino, me pongo mi mejor atuendo para la ocasión y salgo caminando, camino y camino hasta llegar al río, ese río donde siendo tan sólo unos chiquillos nos conocimos; aún recuerdo el vestido que llevaba Josefa, tenía 16 años, yo 18 y disfrutábamos de la vida como más nadie lo hacía. Luego de ese día, nos encontrábamos cada Jueves en la noche, a la orilla de este río, para amarnos sin igual, para entregarnos en cuerpo y alma. Este río cómplice de nuestro amor, este rio hoy será cómplice de nuestro encuentro. Son tan sólo las 2 de la mañana, espero estés igual de hermosa que cuando te despedí hace 5 años.

miércoles, 4 de enero de 2017

Esta noche




Quiero que esta noche seamos uno, quiero que tomes una copa del mejor vino que tengas en tu despensa, ese que estás guardando para una ocasión especial, pues no hay mejor ocasión que ésta, hoy es el día para destapar esa botella. Sirve una copa, no importa que estés sola, nadie te va a llamar loca, sólo estamos tu y yo y esta noche seremos uno. Quiero que recordemos aquellos tiempos, aquellos años, cuando bailábamos hasta el amanecer. 

Por un momento sentí que ya me habías olvidado, ya no me veías igual que antes, ni me tenías ese espacio especial reservado, los detalles fueron muriendo, tu amor por mi se fue desvaneciendo, lo sentí así. Sin embargo, mi amor por ti seguía y sigue intacto, yo sólo estaba esperando este momento justo, para lucirme, para darte la misma felicidad de antes, para consentirte como antes. Gracias por darme esta oportunidad, te juro que la voy a aprovechar.

Hoy me pongo mi mejor gala, lo estoy presumiendo con mis amigos, les dije que tu me escogiste nuevamente, que me diste esa oportunidad luego de muchos años, y esta vez no la pienso desperdiciar. Debo confesarte que noté un dejo de envidia en sus ojos, de rabia por saberme tan feliz, que injustos son, uno de ellos incluso quiso hacerme dudar de mi orgullo. Ya no hay tiempo que perder, ya llegó el momento...saldremos a bailar.

Me sacas del closet, quitas un poco el polvo que me cubre, lo entregas en las manos de una niña. Ey! ¿Qué hará ella conmigo? ¿Va a colocarme en el tocadiscos? ¿Estás segura que ella lo sabe hacer?....Ey....Ey....¿pq me está tratando tan brusco?....siento calor....¿no te das cuenta que me está matando? ¡¡Adiós mundo cruel!! 

- Aquí tiene Maestra, la cesta hermosa que hizo mi hija con material reciclado.

@mili_fabi

lunes, 2 de enero de 2017

En el carro




Acaba de suceder, estoy asustado, aterrado, mis manos tiemblan, estoy sudando, no logro calmar el ritmo de mi respiración y conseguir un poco de calma. ¿Cómo me atreví a hacerlo? Tenía tantos años pensándolo pero jamás me creí capaz de hacerlo.

Estaba tan cansado ya de la rutina, un día de trabajo arduo, atender clientes insoportables, sonreír, vender, terminar agotado, regresar a casa, jugar un rato con mis hijos, algo rápido para luego sumergirme en la computadora a revisar mis redes sociales y pasar el tiempo hasta que me diera sueño, esperar la cena, comer y acostarme a dormir, algunas veces debo hacerle el amor a ella, no puedo dejar que pasen los días sin hacerlo, tengo un calendario (ella no lo sabe) para no excederme de 4 días continuos sin hacerlo.

Este día, me reuní con unos amigos en un café, estaba él, tenía años que no lo veía, pero al volver a verlo sentí la misma rabia del primer instante, de aquel desventurado día en que lo encontré con ella en la cama, en mi cama. Recuerdo que los vi, me dio un ataque de risa inmediatamente, los interrumpi, sólo les dije que se vistieran y salieran de casa, no quería ver a ninguno. Rompí muchas cosas en casa ese día, no estaba en mis cabales, así como ayer, tampoco estaba en mis cabales.

Transcurrió un tiempo normal y agradable entre amigos, salimos del café y lo invité a él a tomarnos unos tragos, me aseguré de llevar en el carro la pistola cargada, nos fuimos a un bar y empezamos a beber y a hablar. Ahora estoy lavando el carro para eliminar todos los rastros de lo que hice...ella no se sentirá bien por esto, pero yo si, ya nunca más tendré la imagen de mi "amigo" cogiendose a mi madre.

@mili_fabi